Esta película de Dreamworks está atiborrada de colores y luces, música y acción. Nada más en los primeros 15 minutos hay como 3 canciones de celebración. Y todas son (como) vídeos musicales. De hecho, la película parece un solo, largo, vídeo musical.
La pelí está excesivamente dirigida al público infantil. Digo "excesivamente" porque, a diferencia de otras películas de 3D (sobre todo las de Píxar), esta película no tiene ningún mensaje "serio" o por lo menos historia, que los adultos podamos disfrutar. Es una película infantil. Realmente infantil.
Un juego de luces y colores, tremendamente bien hecho, pero intrascendente. Se salva, de todas maneras, porque definitivamente sí hay una historia y sí hay cierta coherencia. Lo mata la poca profundidad, un final inconcluyente y algunas bromas escatológicas, realmente innecesarias. Eso sí: ¿tienes una hija de tres años? ¡Le encantará! 6/10.
La pelí está excesivamente dirigida al público infantil. Digo "excesivamente" porque, a diferencia de otras películas de 3D (sobre todo las de Píxar), esta película no tiene ningún mensaje "serio" o por lo menos historia, que los adultos podamos disfrutar. Es una película infantil. Realmente infantil.
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| Estos son los personales principales: la princesa Poppy y Ramón (Branch, en inglés). El único personaje con cierta profundidad es Ramón, cuyo mal genio es el único descanso de estos seres "diabéticamente" dulces. |
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